Wednesday, July 04, 2007

iPod

Fui de lo más visceral.
Caí en la tentación
y no me libré del mal;
Hoy, creyéndome en la cima
me comí una cucharada
de mi propia medicina.

Mi carne fue más fuerte
ya que le di rienda suelta
y creyendo ir en contra de la corriente,
vengo a caer en cuenta
de que sólo soy otro creyente.

Uno más de la manada
de los que siempre dicen
que no se comen la carnada.
y con dolor lo reconozco,
eso que a mi nunca me pasaría,
hoy señores me costó
doscientos setenta dólares…más IVA.